viernes, 27 de julio de 2012

LAS VOCES VIENEN

Poco a poco, en tan solo dos semanas, las voces han venido a mover el piso, la conciencia pudiera hacer honor a la injusticia que por años han vivido.

Poco a poco y uno a uno los responsables de que el fútbol sea un espectáculo; los jugadores, se atreven a declarar que es lo mejor terminar con el PACTO DE CABALLEROS.



Si la Liga Mx quiere ser liga de alto nivel, tiene que erradicar el Pacto de Caballeros.



¿Qué ha pasado?, y con esto quiero entender el lado directivo; el fútbol mexicano esta sobre valorado, esto es que, las percepciones que reciben los ejecutores de este espectáculo no corresponde con su aportación al contenido del mismo, y a esto se le llama un Déficit.
Este déficit deportivo y financiero (Sí, es comprobable lo que trato de explicar), provoca que los dueños quieran recuperar las altas inversiones en nominas que mes con mes, año con año han hecho en ejecutores que no han logrado los objetivos específicos.

Con esta idea entonces para pedir la erradicación del Pacto de Caballeros, se tiene que reconocer que hoy los futbolistas profesionales ganan más de lo que debieran, mucho más.

¿Qué justifica que de un año a otro un jugador solicite un aumento salarial de más de 70%?.
Este ejemplo es cotidiano en el mercado del fútbol. Por ejemplo, un joven que hoy gana una cantidad mínima y que, siendo regular un medio torneo al siguiente año le solicita a su “representante” que quiere ganar 70 veces mas de lo que fue su salario. ¿En que se justifica esto?, ¿En su rendimiento?, ¿fue campeón de México?, ¿fue goleador del torneo?, ¿jugo todos los minutos posibles del campeonato?, no fue expulsado en ninguna ocasión?, ¿califico su equipo a liguilla?, ¿fue líder de asistencias a gol?. En ninguna de estas. Un jugador quiere ganar más porque asume que así es el fútbol, y lo triste es que realmente así opera el fútbol. Las directivas terminan por ofrecer 35%, 45% o quizás hasta ese 70% que solicito de aumento.
Mismo caso aplica para los jugadores promedio del fútbol mexicano, los titulares, las figuras locales y los seleccionados nacionales.

De esta manera es que hoy sigue operando este absurdo llamado PACTO DE CABALLEROS. Como ya te pague durante dos o tres años tanto dinero y no sucedió nada, debo recuperar, a pesar de que laboralmente ya no nos relaciona ningún contrato, lo invertido, cobrando a tu nuevo equipo un pago por tu traspaso o préstamo y así no generar tanta perdida.

Con esta idea creo que, FINALMENTE se debe dar ese paso,

¿No más Pacto de caballeros? SI!. Violenta la dignidad del jugador, coarta su derecho de buscar un nuevo club sin la restricción o interés del club anterior con quien ya nada lo relaciona, pero de la misma manera el jugador debe hacer conciencia que cuando esto suceda su valor se ajustara al mercado.

La agencia libre tiene esa fabulosa virtud deportiva, la cual consiste en que realmente y en función de tu rendimiento deportivo tendrás tantas opciones posibles como tu talento lo amerita y esto es un riesgo porque ese mismo talento puede provocar que ningún club se interese. Equilibrio de mercado.

Las voces ya empezaron a salir y celebro esta disposición de varios jugadores. Den el paso!. Vayan más allá, no solo se queden en la entrevista, formen un comité y pidan una audiencia de carácter urgente en las oficinas de la Liga Mx. Verán que tener iniciativa da resultados.

El Pacto de Caballeros tiene que desaparecer y de la misma manera el sobre valor de mercado que hoy existe, sufrirá una evidente modificación. Nuevas estrategias de contrato, nuevas cláusulas, rescisiones de contratos y otros detalles que equilibran la relación, equipo-jugador.

Las voces vienen y el tiempo se acerca ya!. Así lo creo.

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lunes, 16 de julio de 2012

CUANTAS VECES SEA NECESARIO

Vamos!, no otra vez!. Cuantas veces más faltan?. Es que esto va a ser así toda mi vida?. Cuanto más puede aguantar una persona normal como yo, que se somete a todo lo que se le dice y nuevamente vuelve a presentar, exactamente lo mismo que al principio: cáncer.




Martes. Tan solo un par de días antes y en compañía de mi esposa y amigos había festejado con mucha alegría y con la ilusión de seguir adelante con mi vida normal alrededor del cáncer. Ese martes como otras ocasiones anteriores, el famoso balde de agua fría me callo muy temprano por la mañana. Detecte en mi orina una especie de costra. Algo no esta bien.

Fue mi primer impresión e inmediatamente REACCIONE!!.

Ahora si no me tape los ojos, no me puse una venda en los ojos. Mi primer reacción fue concertar una cita para tomarme un ultrasonido y a la mañana siguiente después de haber llevado una muestra para un examen general de orina, entre a la clínica para CONFIRMAR lo que yo ya sabia.



Aparentemente tienes dos nuevos implantes nuevamente en tu vejiga. Tu riñón esta bien, tu higado esta bien; fueron las palabras frías pero amigables del doctor.

Tan solo tres días después de haber detectado mi lesión, teníamos ya nuestro plan de acción.

En la enfermedad y en específico cuando se trata de cáncer, el tiempo es factor. Algo muy positivo de esta jodida reincidencia es que en esta ocasión he REACCIONADO DE MANERA INMEDIATA.

Y esa es la clave.

Esa es la forma que todos debemos seguir para vencer al cáncer. Cuanto tiempo le vamos a ganar?. No se sabe. Ni el mejor oncólogo te puede asegurar la victoria total.

Por eso debemos vivir preventivos, prevenidos a cualquier síntoma.

Así lo haré.



Si en algo puede servir este pequeño escrito es para AVISAR a cualquier persona que lo lea que REACCIONE a los síntomas. Actué en cuanto vea algo anormal.

Un dolor extraño, falta de aire, un color pálido de piel, falta de apetito, sangre en la orina. Cualquiera de estos síntomas NO SON NORMALES. Nuestro cuerpo es perfecto y su perfección es sin ningún síntoma extraño.

Traten el síntoma inmediatamente. Exámenes generales de orina, de sangre, ultrasonidos, placas de torax, tomografia, hasta un PET, son los test que sugiero consideren para salir de dudas o atacar lo que haya que atacar de manera oportuna.



Tan solo cuatro días después de mi primer síntoma, estaba nuevamente en un quirófano, ante una nueva operación (9), pero con la misma idea de siempre. VIVIR!.



He aprendido mucho sin duda alguna de mi cuerpo a través de este fenómeno del cáncer. He aprendido mucho de la gratitud a través de todo este proceso.

Sigo sin alimentar en mi cuerpo dolor, odio, resentimiento u otra emoción que acompaña a este mal.

Estoy claro que esta enfermedad tiene que ver con las emociones. Cualquier emoción que me haya detonado esta enfermedad esta ya procesada. Así lo creo. Así lo siento.

Si el cáncer persiste no es porque yo lo atraiga o porque no haya sanado algunas emociones. El cáncer es una enfermedad celular y todos nosotros producimos células. Yo me encamino a quebrar el código interno que cree que sigue formando reincidencias.

Mientras ese éxito llega, seguiré batallando y luchando.

De algo estoy seguro. NO VOY A MORIR DE CÁNCER.